La Paisana - Punta Cana - Álbum de fotos

El mejor restaurante del hotel. La carne es de primera y mantiene muy bien su inspiración Argentina. Los chorizos, la entraña, las empanadas, el bife de Chorizo y todo en general fue excelente. Lo único que no estaba bueno fue la morcilla, ya que no era del tipo argentina. (Tenia arroz… o algo parec

El lugar es muy cálido , la atención excelente y la comida aún mejor . Lo recomiendo y sin dudas volveré !! Muchas gracias al Chef Johan por su atención , me hizo sentir como en casa !

La carne muy buena la verdad! Recomiendo la parrillada y así pruebas todas las carnes. La primera vez que fuimos no nos ofrecieron otros cuchillos aptos para poder cortar la carne y no morir en el intento. (La segunda vez que lo visitamos sí). Tienen el aire acondicionado muy muy bajo! Hacía mucho

Pedimos de entrada empanadas de carne y cebolla rellena de panceta, ambas cosas súper ricas. La cebolla rellena una novedad. De plato principal pedimos la parrilla lata dos. Y la verdad (a pesar de que no era muy variada), la carne estaba súper rica, tierna y muy sabrosa. La parrilla venía acompañad

Carne muy rica y provolone excelente....mi nota es causa de haber esperado sentados mas de una hora entre primer y segundo plato, y media hasta que nos atendieron....un asado no tarda eso en hacerse, es cuestión de organización ( las mesas de los lados estaban flipando también por la espera) Los cuc

Cómo todos los restaurantes a la carta de la cadena paladium acá en punta cana tienen un exelente servicio. Buena comida y todo abundante por más que sea a la carta

Una vergüenza, hace 2 horas que estamos esperando para comer. Estamos de vacaciones y x eso sabemos entender algunas cosas pero esto ya es mucho....ya hay falta de respeto...estan limpiando y aun ni aparecen los platos....

Comida excelente. Nos encantó el sabor, la cantidad era un poco justa. Recomiendo la provoleta. Pero salimos desesperados por la demora entre platos. Nos fuimos sin ni tan siquiera pedir el postre ya de aburrimiento. Creo que no había tanta gente para justificar tanta espera